Capítulo
10, Un viaje espiritual
(POV de Renamon)
-Mi
querido Exveemon…- dije en voz baja, sonriendo y esperando que él, de alguna
forma… sintiera lo que decía, sin importar en donde estuviera –Espero verte
pronto… mí amado dragón-
Seguí
admirando el paisaje por varios minutos más. Realmente me sentía atrapada por
el, y me sentía feliz, mientras todavía recordaba la maravillosa noche que
había pasado al lado de mi amado.
No
sé cuánto tiempo más pase con la vista perdida en la nada, pero pronto me di
cuenta que ya era el momento de dirigirme al comedor para el desayuno.
En
cuanto entre, todo se veía como siempre. La persiana de la sala donde
Digitamamon comía cerrada, Yashamon sirviendo los desayunos, y todas mis amigas
comiendo. Sin embargo, había algo diferente en ese momento.
No
estaba segura, pero todo se sentía mucho más calmado y tranquilo que lo
acostumbrado. Normalmente se sentía un aire tenso y frio, triste, por toda las
cosas por las cuales pasábamos a diario, aunque en ese día ese no parecía ser
el caso, y una parte de mi estaba contenta por eso.